Se presentó en el espacio alternativo del RAI (Recursos de Animación Intercultural, un local de muchos metros cúbicos que dispone de una muy buena sala de exhibición) la actriz y clown Gabriela Sandoval con su trabajo unipersonal ‘Todo sobre Penélope’, cuyo subtítulo es una buena definición del espectáculo: ‘Delirio de una payasa’.

En efecto, Sandoval nos ofreció un elaborado ejercicio escénico de una payasa que conoce muy bien su oficio y que sabe llevarlo a sus extremos más histriónicos, con un personaje cuya exuberante interpretación la conduce a crearse ella misma su ‘partenaire’ en escena, el amor que busca, espera o sueña que vendrá. Y como no viene, lo inventa con lo que encuentra en un cubo callejero de la basura.


Caracterizada como una  mujer atractiva aquejada por el nerviosismo de la modernidad urbana, el personaje de Penélope sufre varias transformaciones y crea otras con los objetos que  va encontrando. Gran hilaridad despertó su conversión en una enana que canta y baila con gran donaire. Una bota de piel peluda se convierte en un perro faldero. Y un conjunto formado por una gabardina y unos pantalones, sacados de un contenedor de basura, se convierte en el acompañante y bailarín que ella ha esperado o soñado.


Sandoval ofreció una actuación alocada y llena de energía, con subidas y bajadas del escenario,  que supo lidiar muy bien con el escaso público que había en el RAI, obligada por ello a poner toda la carne en el asador para movilizar al respetable. Lo consiguió con una gran demostración de estilo, derroche de facultades y una comicidad de payasa con ganas de romper esquemas.


El público del RAI respondió a la entrega de la actriz con entusiastas aplausos y sinceras felicitaciones.