40 años al servicio del teatro

 

La cultura para el artista es un servicio,
para el Estado una obligación
y para el pueblo un derecho

Cuatro décadas dedicados y empeñados en construir y vivir de un oficio (Titiritero), más de tres décadas recorriendo caminos, parando en lugares alejados de nuestra sede actual en el Parque del Agua y compartiendo inquietudes con gentes de distinta lengua y muy diversas procedencias; pero siempre estando cerca y con las escuelas. Cuatro décadas dedicados al teatro de títeres, cuatro décadas creando una cosmogonía en torno a la educación, la cultura y los muñecos. Sabemos que la educación es el comienzo de la cultura y la cultura la continuación de la educación.

Pablo Girón en ‘Amor de Cuentos’

Este teatro de títeres siempre ha partido de la tradición para llegar a las vanguardias, ha intentado investigar lo conocido para introducirse en lo desconocido. Nos hemos hecho mayores construyendo un oficio. Siempre procuramos viajar ligeros de equipaje pero inquietos por aprender siempre algo nuevo. Nuestro lema es y será mientras estemos en este oficio: viajar ligero para llegar compensado.

Esteban Villarrocha, Iñaki Juárez y Pablo Girón, los tres puntales del Teatro Arbolé.

Son muchas las historias contadas y recibidas, muchos los espectadores que nos han visto, algunos nos conocen de cuando ellos eran niños, y ahora que volvemos a vernos, son padres y madres; multitud son ya las funciones realizadas en estos años, y ya se sabe: todo avance cuantitativo es un avance cualitativo, al menos, en eso confiamos y creemos.

Espectáculo ‘La Caperucita Roja’

Teatro Arbolé, hoy ocupa un lugar que transciende el ámbito aragonés y prueba de ello son las continuas giras por España, así mismo el Teatro del Parque del Agua Luis Buñuel en Zaragoza (que ahora cumple 10 años), es referente, no solo, en las programaciones para público familiar, también tienen reconocimiento por sus programaciones musicales y de Teatro para público adulto. Su proyecto didáctico es modelo para muchas compañías y su escuela de teatro para niños y niñas se consolida, como una verdadera escuela de espectadores.

En estos años hemos pasado de la ingenuidad ácrata de los inicios a la construcción tangible de un sueño. En este tiempo hay muchos días, años, con momentos difíciles y otros con muchas satisfacciones, pero lo mejor y lo que nosotros más valoramos, quizá sean los miles de aplausos conseguidos, las miradas inquietantes y ávidas de sorpresa de los espectadores que acuden a nuestras representaciones. Esta es  nuestra razón de ser.

Imagen de ‘Veo Leo’.

Conmemorar es de alguna manera hacer recuento y exhibir el recorrido, eso es lo que pretendemos en este 2018 y 2019. Exhibir.

DIEZ  AÑOS DESPUES

Hace ya diez años que Teatro Arbolé apostó por crear un nuevo espacio para las artes escénicas y sobre todo para los títeres, situado en el Parque del Agua Luis Buñuel. Era un sueño que se hacía realidad y que como decía nuestro paisano Goya, el sueño de la razón crea monstruos. Como buenos ilustrados sabemos de las pesadillas que provoca la razón.

Pelegrín, durante las Fiestas del Pilar.

Tras diez temporadasen nuestra nueva ubicación del Parque del Agua Luis Buñuel, los resultados, creemos en nuestra humilde opinión, son positivos. Son más de 2.950 actividades, alrededor del 78 % están dedicadas a público familiar o escolar y casi el 50 % a los títeres.

Iñaki Juárez y Julia Juárez, en ‘Los Tres Cerditos’.

Teatro Arbolé después de tantos años en este oficio del Teatro, consolida su proyecto y ofrece varias líneas de trabajo para el fomento de las Artes escénicas, creemos que diversificar y acumular experiencia es necesario para afrontar los nuevos retos. Los tiempos están convulsos y ahora más que nunca debemos aferrarnos a nuestro oficio (el de titiriteros): Para mantener los puestos de trabajo y generar recursos, y para  ofrecer a los ciudadanos (el público y el no público) una ocupación del tiempo de ocio que llene el espíritu y contribuya a educar en valores.

El Teatro Arbolé en el Parque de las Aguas de Zaragoza.

Teatro Arbolé en estos diez años, en su nueva sede, se ha consolidado como un espacio lleno de vida, un lugar para enseñar a convivir a través de la cultura desde el respeto, la tolerancia y la solidaridad, además de normalizar y consolidar la exhibición de las artes escénicas para la infancia y la juventud, y fomentar y potenciar la creación y formación de públicos.

Por eso, una vez más, y no será la última:

¡Público! ¡Respetable público! La función va a comenzar.