(Imagen de la exposición en el Fetén de Gijón. Foto TOPIC)

El TOPIC no para en su objetivo de dar a conocer por toda la Península el patrimonio titiritero común extraído de sus propios fondos, mientras a su vez prepara nuevas exposiciones temporales en su sede de Tolosa.

Marionetas de Mariona Masgrau. En primer plano, Malic. Foto TOPIC

El pasado domingo 25 de febrero de 2024 se inauguró en el marco del Fetén, la Feria Internacional de artes escénicas para niños y niñas que tiene lugar anualmente en Gijón, la exposición «TOPIC: una mirada al mundo del títere». En ella se pueden ver cerca de 120 piezas, que son pequeños fragmentos de diferentes exposiciones que han tenido lugar en el TOPIC desde sus inicios, en el año 2009, hasta ahora mismo; de hecho, están expuestos unos cuantos títeres de la última muestra que ha tenido en la sala de temporales sobre el afamado titiritero inglés John Blundall.

Marioneta de la China. Foto TOPIC

La exposición se encuentra separada entre dos mundos: Oriente y Occidente, según la procedencia de las marionetas. En la Sala Oriente hay piezas de Mali, China, India, Indonesia, Vietnam… y en la sala Occidente de Cataluña, País Vasco, América y Europa. Todas ellas han formado parte de distintas muestras que ha albergado el TOPIC a lo largo de sus 14 años de vida. Esta exposición permanecerá abierta hasta el día 1 de marzo, en que finaliza la feria.

La Máquina Real, evolución del teatro de figuras Siglo XI – Siglo XX 

El TOPIC anuncia también la inauguración para el 8 de marzo de 2024 de su nueva exposición temporal dedicada a la Máquina Real y a la evolución del teatro de títeres en España, la cual estará abierta varios meses hasta el inicio de la próxima temporada.

Imagen de la representación de ‘La selva sin amor’, de Lope de Vega, con dirección de Jesús Caballero, realizada en el Congreso de Unima Federación España de Ciudad Real, en 2021. Foto compañía

La exposición corre a cargo de la compañía de La Máquina Real que dirige Jesús Caballero, quien ha sido el artífice de una fiel recreación de lo que fueron los espectáculos de La Máquina Real en España durante el Siglo de Oro.

Reproducimos aquí un texto de presentación de la misma compañía sobre la exposición:

‘La escultura animada posee una historia larga y extensa. El ser humano siempre se ha dejado seducir ante una figura que reproduzca alguna acción o movimiento, suficiente para aparentar la existencia de un “ánima”. Esta es la razón por la cual la magia de los objetos animados ha sido utilizada, desde las más antiguas civilizaciones hasta nuestros días, con fines relacionados con la propaganda del poder, la devoción religiosa o la pura diversión, ya sea aristocrática o popular.

Imagen de la representación de ‘La selva sin amor’, de Lope de Vega, con dirección de Jesús Caballero, realizada en el Congreso de Unima Federación España de Ciudad Real, en 2021. Foto compañía

En España gozamos de la fortuna de tener una amplia y cada vez mejor documentada historia de este género, donde conviven manifestaciones de diferente carácter que agrupamos bajo el término de Teatro de Figuras, ya que incluye figuras corpóreas que participaron en ceremonias simbólicas, litúrgicas, celebraciones y espectáculos públicos, así como el teatro de épocas anteriores al siglo XVII.

Nuestra compañía trabaja, desde el año 2005, en la recuperación de los arcaicos Bavasteles, el legado árabe del teatro de sombras, seguidos de los retablos mecánicos que darán paso al retablo de figuras medieval inmortalizado por Melisendra y recogido por Cervantes en el Quijote. Imprescindible es también la Tarasca con sus botargas y gigantones predecesores de la máquina real. La revolución industrial dio lugar a los tutilimundis y el cinematógrafo, y durante el siglo XIX la maquina real dio paso al teatro romántico con los títeres de hilo. Por supuesto, no podemos olvidar dar vida al recalcitrante Don Cristóbal y su teatrillo de cachiporra que servirá de inspiración a Francisco Nieva para la creación de sus marionetas furiosas.

Diez escenografías constituyen esta exposición, siguiendo el orden cronológico de la aparición de las figuras en el tiempo. Como criterio expositivo se han desnudado las estructuras de los retablos, para poder revelar lo que se oculta durante las representaciones teatrales’.